Métodos de pago para pagos recurrentes

Cada vez más consumidores están optando por servicios que ofrecen pagos recurrentes para actividades como suscripciones mensuales, membresías anuales o pagos por servicios continuos. Para muchas empresas, este sistema también cada ofrece más beneficios e incentivos. Sin embargo, la cuestión no es solo cómo ofrecer este servicio, sino cómo gestionar los pagos. Y aquí entra en juego otro elemento clave: contar con métodos de pago confiables y seguros. Teniendo esto en cuenta, en este artículo hablamos sobre diferentes opciones de métodos de pago para pagos recurrentes y otras cuestiones relacionadas que es necesario conocer antes de ofrecer servicios y productos basados en este sistema de pago.

¿Qué es un pago recurrente?

Un pago recurrente se refiere a un tipo de transacción en la que se realiza un pago de forma periódica, ya sea semanal, mensual o anual. Esta forma de pago es comúnmente utilizada para servicios o productos que requieren un pago continuo, como suscripciones a servicios en línea, pagos de préstamos o incluso gastos mensuales como el alquiler o la hipoteca.

La principal ventaja de un pago recurrente es que se establece un acuerdo entre el pagador y el receptor. Esto hace posible que los pagos sean automáticos y regulares, a la vez que evita la necesidad de recordar fechas de vencimiento y hacer transacciones manuales cada vez.  

Pero, ¿cuántos tipos de pagos recurrentes existen? ¿Cómo funcionan? Lo vemos a continuación.

 Tipos de pagos recurrentes

Existen varios tipos de pagos recurrentes que se emplean en diferentes contextos y sectores. Los tipos más comunes son estos:

• Pago recurrente de importe fijo: en este tipo de pago, el cliente realiza pagos periódicos por un servicio o producto, y el importe de cada pago es constante. Por ejemplo, una suscripción mensual a una plataforma de streaming en la que el usuario paga la misma cantidad cada mes.
• Pago recurrente de importe variable: en este caso, los pagos periódicos pueden variar en cantidad. Por ejemplo, una factura de servicios públicos como la electricidad o el agua, donde el monto a pagar depende del consumo mensual.
• Pago recurrente con tarjeta: este tipo de pago se realiza mediante la autorización de pagos recurrentes en una tarjeta de crédito o débito. Se emplea para servicios como membresías de gimnasios o suscripciones a revistas, donde los pagos se cargan automáticamente en la tarjeta del cliente.
• Pagos quincenales, mensuales, trimestrales o anuales: los pagos recurrentes pueden tener diferentes frecuencias, como quincenales, mensuales, trimestrales o anuales, según los acuerdos entre el proveedor y el cliente.
• Domiciliación de pagos automáticos (SEPA): la domiciliación bancaria es un método común para los pagos recurrentes en Europa. Permite a las empresas cargar automáticamente el importe de los pagos en la cuenta bancaria del cliente.

Diferencias entre pago recurrente y pago único

Las diferencias entre el pago recurrente y el pago único radican principalmente en la periodicidad y la naturaleza de las transacciones financieras.

La primera diferencia tiene que ver con la periodicidad, ya que el pago recurrente implica transacciones regulares a intervalos establecidos, como mensuales, trimestrales o anuales. En contraste, el pago único se efectúa de manera inmediata y puntual, sin una periodicidad establecida.

Por otra parte, la diferencia entre ambos métodos de pago tiene que ver con la naturaleza de la transacción. Esto significa que, en el pago recurrente, el cliente autoriza a la empresa a realizar múltiples pagos a lo largo del tiempo, generalmente relacionados con un servicio continuo o una suscripción. Por ejemplo, una suscripción mensual a un servicio de streaming. En el pago único, la transacción implica un solo pago en un momento determinado, como la compra de un producto específico.

Otra diferencia clave tiene que ver con la autorización. Es decir, para el pago recurrente, se obtiene autorización para hacer múltiples pagos distanciados en un período de tiempo establecido. En cambio, el pago único implica la autorización para un solo pago inmediato.

Ahora que sabemos cuáles son las principales diferencias entre pagos único

Métodos de pago para pago únicos

Hay diferentes métodos de pago único, cada uno con sus propias ventajas y consideraciones. Algunos de los métodos de pago comunes para pagos únicos incluyen los siguientes:

• Tarjetas de crédito y débito: son uno de los métodos de pago más populares para compras únicas. Los consumidores pueden efectuar pagos de manera segura y conveniente utilizando sus tarjetas en tiendas físicas y tiendas online.
  
  
• Efectivo: aunque no es una opción viable en transacciones online, el efectivo sigue siendo una opción para realizar pagos en persona, especialmente en comercios minoristas y locales.
  
  
• Transferencias bancarias: permiten a los consumidores transferir fondos directamente desde su cuenta bancaria a la del vendedor. Esto se emplea menudo para compras de alto valor, como la compra de propiedades o vehículos.
  
  
• Pagos móviles: sistemas como Apple Pay y Google Wallet, permiten a los usuarios hacer pagos con sus dispositivos móviles vinculados a sus cuentas bancarias o tarjetas de crédito.
  
  
• Cheques: aunque son menos comunes en la era digital, los cheques todavía se emplean ocasionalmente para hacer pagos únicos, especialmente en transacciones comerciales y pagos entre empresas.
  
  

Métodos de pago para pagos recurrentes

Los métodos de pago para pagos recurrentes son fundamentales para negocios y servicios que requieren cobrar de manera periódica a sus clientes. Algunos de los métodos de pago más utilizados para pagos recurrentes son estos:

• Tarjetas de crédito y débito: es uno de los métodos de pago más populares para pagos recurrentes. Los clientes proporcionan sus datos de tarjeta y autorizan a la empresa a cargar automáticamente sus cuentas en intervalos regulares, como mensualmente.
  
  
• Transferencias bancarias automáticas: las empresas pueden configurar transferencias bancarias automáticas. Para ello, los clientes autorizan a la empresa a debitar automáticamente sus cuentas bancarias en fechas específicas para realizar pagos recurrentes.
  
  
• Domiciliación bancaria: los clientes autorizan a la empresa a cargar automáticamente sus cuentas bancarias con el importe acordado en fechas establecidas. Este método es frecuente para pagos recurrentes como facturas de servicios públicos.
  
  
• Pasarelas de pago online: las pasarelas de pago en línea, como PayPal y Stripe, ofrecen la posibilidad de configurar pagos recurrentes de forma segura, lo que facilita a las empresas la gestión de suscripciones y membresías.
  
  
• Pagos con tarjetas virtuales: algunas empresas emiten tarjetas virtuales específicas para pagos recurrentes. Estas tarjetas tienen un límite de gasto y se utilizan exclusivamente para efectuar pagos periódicos.
  
  

Beneficios del pago recurrente

No cabe duda de que los pagos recurrentes ofrecen una serie de beneficios tanto para las empresas como para los clientes. Uno de los principales beneficios que ofrece a las empresas es que les permite contar con ingresos regulares y predecibles. Esto es especialmente útil para negocios que ofrecen servicios de suscripción, membresías o productos de pago recurrente. Saber cuándo y cuánto dinero vendrá permite una mejor planificación financiera.

Además, con la autorización de pagos recurrentes, el riesgo de impago se reduce significativamente. ¿Por qué? Porque los clientes han autorizado previamente los débitos de sus cuentas, lo que disminuye la posibilidad de que se olviden de realizar un pago o no tengan fondos suficientes en sus cuentas.

Por otra parte, los pagos recurrentes pueden aumentar la retención de clientes. Al ofrecer opciones de pago cómodas y regulares, las empresas pueden mantener a sus clientes satisfechos y comprometidos a largo plazo. Además, al mantener a los clientes comprometidos con pagos recurrentes, las empresas pueden aumentar la vida útil del cliente, lo que se traduce en un mayor valor a lo largo del tiempo.

Por último, cabe destacar que, desde la perspectiva del cliente, los pagos recurrentes simplifican la gestión de gastos habituales. La razón es que, al no ser necesario hacer pagos manuales cada vez, se ahorra tiempo y evita olvidos.

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La solución de pago de SeQura incluye la opción de pago BNPL (compra ahora y paga después). La opción de pago BNPL de SeQura permite a los consumidores hacer compras online y pagarlas en cuotas, lo que puede ser una opción atractiva para aquellos que no desean pagar el total de la compra en el momento de la transacción.

Además, SeQura también ofrece otras opciones de pago, como el pago aplazado o el pago en tres plazos, que pueden adaptarse a las necesidades financieras de los consumidores. 

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